Buscar este blog

miércoles, 7 de julio de 2010

"Entre vidrio y metal"

Les cuento de este otro cuadro, "Entre vidrio y metal", comenzó siendo un gato, muy elegante, que se acercaba a una mesa donde había un jarrón con hortensias... Pero... no me convencía... así que durmió todo el verano... y ahora le di término, pero con otro tema. Jaja.
Siempre digo que, si a algunos de mis cuadros le hicieran estudios con rayos UV, se vería que debajo, pueden encontrar otro sin terminar. O terminado, pero que no me gustó al final, y se convirtió en otra cosa totalmente distinta a la que fuera alguna vez.
Vuelvo a lo que comentara en otra oportunidad:
¿Qué mueve a la inspiración? ¿Qué la motiva? ¿Qué parte de nuestro YO interior decide que esto siga y esto no?
Lo cierto es que es emocionante ver lo que puede hacer esa parte que no dominamos y que se guía por el instinto y el gusto particular de cada uno, y que nos lleva a hacer estas cosas que parecen locas, pero que, al final, son la escencia de nosotros mismos.
Esto es una prueba de ello. Cuando creemos que ya está decidido, surge "algo" que cambia el rumbo que habíamos tomado y nos conduce hacia otro destino inimaginado.
¡Es emocionante, si se piensa en ello! Es como vivir una aventura, que nadie sabe cómo termina... ¡Sólo el autor, que somos nosotros mismos!
Espero que les guste.

No hay comentarios:

Publicar un comentario